Más de 250 millones de personas han visitado la Torre Eiffel, el símbolo mundial de Francia, desde que abrió por primera vez hace 125 años. El arquitecto francés, Alain Moatti, estaba a cargo del proyecto para restaurar los 5.400 m² del área del primer piso de la torre.
El propósito era traer una nueva perspectiva de la ciudad, en el que transformar el suelo, previamente desapercibido, en una de las más espectaculares y las mejores atracciones de París. Este objetivo se logra mediante la introducción de una barandilla de vidrio alrededor de la abertura central de la torre y la adición de un suelo de vidrio cerca de ella, dando una extraordinaria vista de la ciudad y también de la propia torre.
Para la construcción de la superficie de vidrio transitable de 130 m², GLASSOLUTIONS desarrolló los productos XTRAGRIP LITE FLOOR, baldosas de vidrio antideslizantes, fabricadas por la planta Eckelt Glas en Austria.
El objetivo era lograr la máxima transparencia a través del vidrio, sin comprometer el aspecto resistente al deslizamiento requerido de la planta.
